¿Por qué los tomates en invierno no saben a nada? Redescubriendo el ritmo de Cantabria en tu plato
Seguro que te ha pasado. Compras unos tomates en pleno enero, con un rojo impecable, pero al probarlos… decepción. Son insípidos, acuosos, una sombra de lo que recuerdas del verano. O quizás te has preguntado por qué las fresas a veces son dulces y jugosas y otras, una desilusión. La respuesta no está en la marca ni en el supermercado, sino en algo mucho más fundamental que hemos ido olvidando: el ritmo de la naturaleza.
En Nutrición Marabini, creemos que reconectar con los alimentos de temporada en Cantabria es uno de los pasos más poderosos que puedes dar para mejorar tu salud, tu bienestar y, por supuesto, el sabor de tus comidas. No se trata de una moda pasajera ni de una complicación innecesaria. Es, simplemente, volver a la lógica con la que nuestros abuelos se alimentaban, una sabiduría que la ciencia nutricional moderna no deja de confirmar.
Esta guía no es solo una lista. Es una invitación a que tu próxima visita al Mercado de la Esperanza o a la frutería de tu barrio en Santander sea una experiencia diferente. Una oportunidad para entender qué te ofrece nuestra tierra en cada momento y cómo aprovecharlo para nutrirte de verdad. Porque comer sano y de temporada no solo es mejor para ti, es también un gesto de apoyo a nuestros productores locales y un regalo para tu paladar.
Beneficios de Comer Local y de Temporada: Más Allá del Sabor
Adoptar el hábito de consumir productos de temporada va mucho más allá de disfrutar de un sabor más intenso. Es una decisión con múltiples beneficios que impactan directamente en tu salud, tu bolsillo y nuestro entorno. Analicemos por qué priorizar los productos de la huerta cántabra es una de las mejores inversiones que puedes hacer en tu bienestar.
- Pico nutricional garantizado: Cuando una fruta o verdura se cosecha en su punto óptimo de maduración, su concentración de vitaminas, minerales y antioxidantes es máxima. Los alimentos que viajan miles de kilómetros suelen recolectarse verdes y maduran artificialmente en cámaras, un proceso que merma significativamente su valor nutricional. Un pimiento de Isla cosechado en agosto contiene mucha más vitamina C que uno importado en febrero.
- Sabor y aroma inigualables: La naturaleza es sabia. Cada producto desarrolla sus máximas cualidades organolépticas (sabor, olor, textura) en su estación correcta. El dulzor de un arándano de Cantabria en pleno julio o la cremosidad de una calabaza en otoño son experiencias que la agricultura intensiva fuera de temporada no puede replicar.
- Más económico y sostenible: La ley de la oferta y la demanda es clara. Cuando un producto abunda porque está en su temporada, su precio baja. Comprar alimentos de temporada es una forma inteligente de optimizar tu cesta de la compra sin renunciar a la calidad. Además, reduces la «huella de carbono» asociada al transporte de larga distancia y a los métodos de cultivo forzado (invernaderos climatizados, etc.).
- Apoyo a la economía local: Al elegir productos de nuestra región, estás apoyando directamente a los agricultores, ganaderos y pescadores de Cantabria. Fomentas un tejido económico local fuerte y contribuyes a mantener vivos nuestros paisajes y tradiciones. Llenar tu cesta en los mercados locales de Santander es una forma activa de invertir en nuestra comunidad.
- Conexión y variedad en tu dieta: Comer según las estaciones te obliga a variar tu alimentación de forma natural a lo largo del año. Esto no solo evita el aburrimiento culinario, sino que garantiza que tu cuerpo reciba una gama mucho más amplia de nutrientes y fitoquímicos, esenciales para una microbiota intestinal sana y un sistema inmunitario fuerte.
El Calendario de la Huerta y el Mar de Cantabria: Tu Guía Estación a Estación
Nuestra región es un auténtico paraíso de biodiversidad. La combinación de mar, valles y montaña nos regala una despensa rica y variada durante todo el año. A continuación, te guiamos por los tesoros que cada estación nos ofrece para que sepas qué buscar en tu próxima compra.
Otoño (Octubre – Diciembre): El Confort en el Plato
El otoño en Santander nos invita a platos más reconfortantes y nutritivos, preparando nuestro cuerpo para el frío. Es la temporada de los colores ocres, los sabores terrosos y los alimentos que fortalecen nuestro sistema inmunitario.
- Verduras estrella: La calabaza es la reina indiscutible. Rica en betacarotenos (precursores de la vitamina A), es perfecta para cremas, asados o incluso postres. Las acelgas y espinacas están en su mejor momento, cargadas de hierro y ácido fólico. No podemos olvidar los puerros, base de innumerables guisos y purés, ni las setas, un tesoro de nuestros bosques que aporta sabor umami y vitamina D.
- Frutas de temporada: Las manzanas y peras de Cantabria están crujientes y dulces. Son una fuente excelente de fibra soluble (pectina), ideal para la salud intestinal. Es también el momento de las castañas y las nueces, frutos secos repletos de grasas saludables, energía y minerales.
- En tu mesa santanderina: Imagina una tarde lluviosa de noviembre. Una crema de calabaza comprada en el Mercado de la Esperanza, con un toque de jengibre y unas nueces locales por encima. O un revuelto de setas de temporada como cena ligera y nutritiva.
Invierno (Enero – Marzo): La Fortaleza de la Tierra
El invierno puede parecer una época de escasez, pero la huerta cántabra sigue ofreciendo vegetales robustos y llenos de nutrientes, perfectos para los platos de cuchara que tanto apetecen con el frío del norte.
- Verduras estrella: Es el momento de las crucíferas. La berza, el repollo, la coliflor y el brócoli están en su apogeo. Son verduras con potentes compuestos antiinflamatorios y depurativos. Los nabos y las zanahorias de invierno, más dulces por el frío, son ideales para caldos y estofados.
- Frutas de temporada: Aunque los cítricos no son un cultivo mayoritario en Cantabria, es su temporada natural. Acompaña tus platos con naranjas, mandarinas y kiwis nacionales para una dosis extra de vitamina C, fundamental en esta época.
- Del mar a la mesa: El invierno es una excelente época para disfrutar de pescados como el jargo o el machote. También es temporada de almejas, perfectas para un guiso marinero.
- En tu mesa santanderina: Un oficinista del centro de Santander puede prepararse un tupper con un buen potaje de garbanzos con berza y chorizo para tener una comida completa y energética que le ayude a seguir la jornada. La clave está en una buena planificación semanal que a menudo se facilita al contar con dietas personalizadas que se ajusten al ritmo de vida de cada persona.
Primavera (Abril – Junio): El Despertar de la Huerta
La primavera es una explosión de vida y color. Los días se alargan y la huerta nos ofrece productos más ligeros, frescos y depurativos, ideales para dejar atrás la pesadez del invierno.
- Verduras estrella: Llegan los esperados espárragos, los guisantes frescos y las habas tiernas. Son una delicia culinaria y una fuente increíble de fibra, vitaminas del grupo B y folatos. También es la temporada de las alcachofas y las primeras lechugas crujientes.
- Frutas de temporada: Las fresas y fresones alcanzan su punto óptimo de dulzor y aroma. A finales de la estación, empezamos a ver las primeras cerezas.
- Del mar a la mesa: La primavera es la temporada por excelencia del verdel (caballa) y la anchoa (bocarte). Pescados azules ricos en Omega-3, fundamentales para la salud cardiovascular y cerebral.
- En tu mesa santanderina: ¿Hay algo más primaveral que un revuelto de ajos tiernos y espárragos? ¿O una ensalada de guisantes frescos con taquitos de jamón? Son platos rápidos, saludables y que celebran la estación.
Verano (Julio – Septiembre): El Sol en tu Plato
El verano es sinónimo de abundancia, color y sabor. La huerta cántabra se llena de frutas y hortalizas que nos hidratan y nos cargan de antioxidantes para protegernos del sol.
- Verduras estrella: Es el momento álgido del tomate, el pimiento (especialmente el de Isla), el pepino, el calabacín y la berenjena. Son la base de nuestra dieta mediterránea y perfectos para ensaladas, gazpachos, pistos o para asar en la parrilla. Las judías verdes también están en su mejor momento.
- Frutas de temporada: Los arándanos de Cantabria son una joya, repletos de antioxidantes. También disfrutaremos de ciruelas, melocotones, melón y sandía, frutas cargadas de agua y vitaminas, perfectas para la hidratación.
- Del mar a la mesa: El verano es la costera del bonito del norte. Un pescado versátil y delicioso, ideal para preparar a la plancha, en marmita o en ensaladas.
- En tu mesa santanderina: Un deportista que acaba de correr por la playa de El Sardinero necesita reponer líquidos y nutrientes. Un buen gazpacho casero con tomates y pimientos locales, seguido de una ración de bonito a la plancha, es la comida de recuperación perfecta. Planificar la alimentación es clave para el rendimiento, y una buena nutrición deportiva siempre se basa en alimentos frescos y de temporada.
Cómo Integrar los Alimentos de Temporada en tu Rutina Diaria
Conocer el calendario está muy bien, pero el verdadero reto es llevarlo a la práctica en nuestro ajetreado día a día. No te preocupes, no necesitas cambiar tu vida por completo. Se trata de introducir pequeños hábitos que marcan una gran diferencia.
Visita los Mercados Locales de Santander
El Mercado de la Esperanza o los mercados de barrio no son solo lugares para comprar, son espacios para aprender. Habla con los productores, pregunta qué está de temporada, déjate aconsejar. Verás productos que no suelen llegar a las grandes superficies y descubrirás el verdadero aspecto y sabor de los alimentos frescos. Es la mejor forma de conectar con el origen de lo que comes.
Planifica tus Comidas Semanales
Dedicar un rato el fin de semana a pensar en las comidas de los próximos días te ahorrará tiempo, dinero y estrés. Hazlo basándote en lo que has encontrado de temporada en el mercado. Si compraste un manojo de acelgas, piensa en cómo usarlas: un día salteadas con ajo, otro en una tortilla y el resto en un potaje. Esta planificación es especialmente útil para quienes comen en la oficina, ya que permite preparar tuppers saludables y energéticos que ayudan a combatir la somnolencia postprandial.
Aprende Técnicas de Cocina Sencillas
Un buen producto de temporada no necesita grandes artificios. Unas verduras asadas al horno con un buen aceite de oliva, un pescado a la plancha con ajo y perejil, o una fruta fresca de postre. La clave es respetar el ingrediente. Cocinar al vapor, saltear o asar son técnicas rápidas y saludables que preservan mejor los nutrientes.
La Congelación es tu Aliada
¿Has comprado muchos pimientos en verano a buen precio? Lávalos, córtalos y congélalos. Así tendrás pimientos locales disponibles en invierno para tus guisos. Lo mismo puedes hacer con guisantes, habas o incluso haciendo conservas de tomate casero. Es una forma excelente de aprovechar la abundancia de la temporada.
La Alimentación de Temporada y tus Objetivos de Salud
Sea cual sea tu meta, basar tu alimentación en productos de temporada es una estrategia ganadora. Su alta densidad nutricional y su riqueza en fibra y agua los convierten en alimentos muy versátiles.
Para quienes buscan un cambio en su composición corporal, es fundamental saber que es posible perder peso de forma saludable sin pasar hambre. Los alimentos de temporada, al ser ricos en fibra y agua, aportan un gran volumen y saciedad con menos calorías. Una gran ensalada de verano o una crema de calabaza en invierno te llenarán y nutrirán, facilitando el control calórico sin sentir privación.
Asimismo, para quienes experimentan malestar digestivo, una dieta rica en alimentos frescos y poco procesados suele ser de gran ayuda. La fibra presente en frutas y verduras de temporada alimenta a nuestra microbiota intestinal y ayuda a regular el tránsito. A menudo, con pequeños ajustes y priorizando estos alimentos, se pueden mejorar problemas digestivos comunes como la hinchazón o el estreñimiento.
Un Compromiso con tu Salud y con Cantabria
Elegir alimentos de temporada en Cantabria es mucho más que una simple elección dietética. Es un acto de consciencia. Es entender que nuestra salud está intrínsecamente ligada a la salud de nuestro entorno. Es apostar por el sabor auténtico, por la máxima nutrición y por la sostenibilidad de nuestra comunidad.
En Nutrición Marabini, nuestra filosofía se basa en guiarte hacia una alimentación que sea saludable, sostenible en el tiempo y, sobre todo, que disfrutes. No creemos en las dietas restrictivas ni en los productos milagro. Creemos en el poder de la comida real, en la sabiduría de la naturaleza y en la importancia de construir hábitos sólidos.
Te animamos a que este fin de semana te acerques a tu mercado más cercano con otros ojos. Observa, pregunta, huele y elige algo que esté en su mejor momento. Cocínalo de forma sencilla y disfrútalo. Ese pequeño gesto es el primer paso en un delicioso viaje hacia una mejor salud para ti y para nuestra tierra, Cantabria.

