Cómo mejorar tu digestión sin cambiar toda tu dieta
¿Sientes hinchazón, digestiones pesadas o molestias después de comer? No estás solo. Muchas personas sufren problemas digestivos sin tener una patología clara. Y lo mejor: en la mayoría de los casos, se puede mejorar mucho sin necesidad de cambiar toda tu alimentación.
Aquí te comparto algunas estrategias sencillas y efectivas.
1. Mastica con calma
Parece obvio, pero masticar bien los alimentos es uno de los mejores regalos que puedes hacerle a tu sistema digestivo. Mejora la absorción de nutrientes, evita gases y reduce la sensación de pesadez.
2. No comas con prisa ni con el móvil en la mano
Comer distraído altera la señal de saciedad y puede empeorar la digestión. Intenta hacer del momento de la comida un ritual de atención: siéntate, respira y come con calma.
3. Ajusta tus cenas
Las cenas copiosas, tardías o ricas en grasas pueden pasarte factura. Intenta cenar al menos 2 horas antes de dormir, elige alimentos suaves y reduce fritos o salsas.
4. Hidrátate, pero no justo en las comidas
Beber agua es imprescindible, pero si bebes grandes cantidades justo al comer, puedes diluir los jugos gástricos. Mejor antes o después.
5. Observa los alimentos que te caen peor
No se trata de demonizar nada, pero cada cuerpo es un mundo. Algunas personas no digieren bien las legumbres, otras los lácteos, otras el gluten. No te obsesiones, pero observa y apunta.
¿Y si sigo con molestias?
Entonces es momento de una evaluación nutricional personalizada. En consulta abordamos cada caso desde la raíz, valorando tu historia digestiva, tus hábitos y tus síntomas. Podemos ayudarte a identificar qué alimentos te sientan mejor, cómo combinarlos y cómo adaptar tu dieta para sentirte bien.
